19. Casa-Miento


Julieta Capuleto y Marigú pertenecen al selecto club de ceremonias de casamiento secretas. Marigú conoció a Jesús en la facultad de Medicina Veterinaria. Lo primero que le dijo fue: Que linda espalda que tienes. Él se sonrojó porque pensó que era un piropo, pero ella quería decirle que le estaba tapando el pizarrón.

Jesús y Marigú fueron un amor prohibido, ella de clase media y él ni de media clase. Lo único que tenían en común las madres de ambos era que ninguno era suficiente para el otro. Sin embargo, con el tiempo Jesús logró ganarse a su suegra. Y Marigú intentó, pero entendió que a la suya quería perderla.

Durante un viaje a Cuzco en el que Marigú fue a visitar a unos parientes, Jesús decidió sorprenderla. Mientras ella iba en un taxi, vio por la calle a un chico parecido a Jesús. Grande fue su sorpresa cuando se dio cuenta que era él. Se bajó del auto y corrió a sus brazos. Luego de unos días de escabullirse para verlo, le contó a su papá sobre el turista enamorado y salieron de la clandestinidad. 

Acompañados por el padre y tío de Marigú, los enamorados se fueron a conocer Ollantaytambo. Un pueblo a 90 km de la ciudad del Cuzco, rodeado de montañas y conocido por ser uno de los principales centros arqueológicos de la zona. Mientras el grupo caminaba, se cruzaron con unos recién casados y el tío de Marigú le preguntó a la pareja: ¿y si se casan acá?

No lo pensaron dos veces y lo hicieron. La pareja dio una vuelta triunfal a caballo por el pueblo, cubiertos en papelitos de colores. Cuando regresaron a Lima, el matrimonio se mantuvo en secreto durante un año porque la noticia podría causar el funeral de la madre de Jesús. 

Jesús y Marigú tuvieron un noviazgo de 7 años, un matrimonio secreto por 1 año y permanecieron 25 años casados ante el ojo público. La moraleja de esta historia es no casarte en un pueblo recóndito porque va a entorpecer los papeles del divorcio. 



Entradas populares de este blog

1. Génesis

2. Eventos

Introducción